El actual retraso en la edad de querer ser madre supone que muchas mujeres se encuentran con una disminución de la reserva ovárica que limita las posibilidades de embarazo con sus propios óvulos.

Cuando la edad ovárica es superior a los 43 años o cuando la hormona antimülleriana (AMH) es muy baja, al hacer la punción para extraer los ovocitos y realizar la Fecundación in Vitro, se consiguen pocos óvulos. Además, la inmensa mayoría presentan alteraciones en la separación de sus cromosomas. Es decir, raramente se consigue un hijo sano.

Por eso, en estas pacientes el tratamiento es la Fecundación in Vitro con óvulos de donante.

Resulta difícil asumirlo. Requiere aceptación, renuncia y deseo profundo de ser madre.

Muchas mujeres no lo aceptan y quieren hacer todo lo posible para intentarlo con sus óvulos. Lamentablemente, esto genera la aparición de técnicas experimentales, caras, ineficaces y engañosas.

A estas técnicas les llaman “reactivación ovárica” “regeneración ovárica” “rejuvenecimiento ovárico”… Algunas, se basan en extraer fragmentos de los ovarios, hacerles algún tratamiento en el momento y reimplantarlos a través de una laparoscopia. Otras inyectan en los ovarios plaquetas y factores de crecimiento, a través de una punción vía vaginal. Y otras inyectan en sangre sustancias que, supuestamente, activan las células madre de la médula ósea.

Recordemos que la esterilidad es una enfermedad y debemos ser rigurosos en su tratamiento. A día de hoy, ninguna técnica de rejuvenecimiento ovárico ha demostrado ser eficaz.

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